El plan de negocios es único para cada empresa, sin embargo, puede seguir una estructura dependiendo de la industria en la que estés.
Hoy te presentamos unas estructuras, secciones o apartados. Estos puedes tenerlos en cuenta en tu proyecto, sin importar que sean negocios innovadores o no.
Es importante que entiendas, antes de empezar con las secciones de tu plan de negocios, que esta es una herramienta útil para tu emprendimiento. Sin embargo, no tener cada apartado no es un impedimento para comenzar, y mucho menos una razón para postergar el inicio de tu negocio.
Este primer apartado se refiere a la perspectiva general de tu negocio, y por lo tanto, debe tener la siguiente información básica:
Debes luego estudiar tu entorno no solo para identificar oportunidades de negocios, sino para desarrollar una propuesta única y exclusiva.
Es indispensable que conozcas la industria o el mercado que pretendes conquistar. Así nada te tomará por sorpresa, y evitarás errores que puedan resultar costosos.
Deberás seguir los próximos pasos para definir esta estructura:
En este apartado de tu plan de negocios debes atender la parte correspondiente a las financias, por lo que tendrás que hacer los siguientes reportes o balances:
Estado de resultados
Primero debes calcular las unidades que venderás y el precio de tu producto o servicio.
Necesitarás estimar los costos fijos o variables, así como también, los intereses y cargas de impuestos a declarar ante los organismos competentes en tu país.
Balance general
En este documento escribirás todas las proyecciones de tu emprendimiento, deberás hacerlo con una visión de 36 meses.
Este se considera un tiempo bastante prudencial a nivel financiero, administrativo y contable.
Flujo de caja
Para este documento puedes contratar a un profesional en el área, porque estos cálculos son sumamente importantes y delicados. Las proyecciones de este balance deben ser mínimo a tres años.
Para este apartado también te recomendamos contratar a un profesional en relaciones industriales o recursos humanos.
Él podrá ayudarte a crear una estructura humana idónea para tu plan de negocios.
Necesitarás elaborar el organigrama de la compañía, así como también, desglosar los contratos con otros colaboradores, clientes o proveedores y más.
De igual manera, necesitas incluir los cálculos de los sueldos y salarios de tu equipo de trabajo, por lo que requirirás experticia en esta área.
Existen muchos diseños de planes de negocios, pero este dependerá del momento o circunstancia en los que se realicen. A continuación, te presentaremos lo más efectivos:
Plan de negocios para nuevas empresas:
Este tipo de plan de negocios tiene como objetivo describir el proyecto empresarial que tienes pensado desarrollar en un futuro inmediato.
Plan de negocios para empresas operativas:
Si quieres darle orden y control a tu compañía en pleno funcionamiento, este plan de negocios es ideal.
Se trata de explicar su situación actual, así como los objetivos empresariales que se desean alcanzar: más ventas, mejores resultados operativos, expansión en el mercado, etc.
Plan de negocios para inversionistas:
Este tipo de plan de negocios te ayudará a captar posibles inversionistas, ya que en el documento está explicada toda la información vital de tu empresa.
Es importante que incluyas la información económica, financiera, de recursos humanos, muy detalladamente. Así como también, todo lo relacionado con el dinero que tu compañía necesita para seguir creciendo.
Plan de negocio ágil:
Este incluye los puntos más importantes o fundamentales de tu empresa para alcanzar las metas deseadas.
En él deberás plasmar las estrategias a seguir para alcanzar el éxito, así como las cifras y presupuestos necesarios para que tu negocio despegue, o se optimice, por todo lo alto.
Plan de negocio estándar:
El plan de negocios más utilizado en el mundo es este diseño. ¿Y por qué? Pues sirve para presentárselo a las entidades bancarias, socios, empleados, e inclusive a los inversionistas.
Se trata de un resumen ejecutivo del Plan de Negocios, donde se incluye una descripción de todos sus aspectos o estructuras destacadas.
Sea que tienes un nuevo proyecto, o una empresa en funcionamiento, lo ideal es que tengas claro su respectivo plan de negocios. Sin embargo, esto no es un obstáculo que deba detenerte de arrancar tu negocio, es solo una guía y no una camisa de fuerza.
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